Los primeros bares gais de Gante surgieron durante los años ‘50. Pero no fue hasta los años ’70 cuando la vida nocturna LGBT gantesa realmente ganó en popularidad.

Vlaanderenstraat 22, Gante

¿Los establecimiento responsables de tal bombazo? La B52, Binky’s Club, la Cherry Lane, la Kingstreet y la Paradox. Esta última vio la luz, o mejor dicho, la noche, en la calle Korte Meer, antes de trasladarse a la calle Vlaanderenstraat, donde la discoteca siguió dando color a la vida nocturna durante muchas décadas más.

Así que la próxima vez que saboree cebolla encurtida braseada con miso en el restaurante Vrijmoed, recuerde que este restaurante con estrella Michelín se encuentra exactamente sobre el suelo sagrado del Paradox.